[Monumental cisterna de almacenamiento de agua; vista de la zona productiva de la parte alta de El Palao; e inscripción funeraria versificada de Cornelia Sirasteiun]
Situación: El poblado íbero-romano de El Palao está ubicado en el término municipal de Alcañiz, a apenas 4 kilómetros del núcleo urbano. Alcañiz es, además, la segunda ciudad de la provincia de Teruel y una de las más hermosas de Aragón. Está perfectamente bien comunicada tanto con el valle del Ebro -a través de Zaragoza- como con la costa -especialmente por Castellón- gracias a la N-232. Sin embargo, no deja de sorprender que la ciudad cuente ya con un espectacular circuito de Fórmula 1 y de Moto GP -MotorLand Aragón- y, sin embargo, siga, desde hace años, esperando una mejora de su conexión viaria con Zaragoza -que, excepto en unos pocos kilómetros, hasta El Burgo de Ebro sigue siendo por carretera general- y todavía no cuente con una variante que evite al viajero tener que cruzar su agitado casco urbano.
Acceso: Para llegar a El Palao, el viajero, saliendo de Alcañiz, ha de tomar dirección Zaragoza y una vez atravesada la gran rotonda que deja a la izquierda el gran establecimiento de una conocida cadena de grandes superficies de alimentación debe continuar hasta la siguiente rotonda y, en ella, girar a la izquierda. Después, continua por una larga recta -a cuyo final ya se divisa el montículo sobre el que se asentó la ciudad romana: nuevamente controlando una amplia y fértil llanura- y, debidamente indicado, debe tomar un desvío nuevamente a la izquierda que le conduce, por una pista, hasta los pies del área arqueológica.
Tipología: Poblado íbero-romano (con perduración que no pasó de la década de los ochenta del siglo I d. C.) y posible municipio de derecho latino antiguo si es que su solar fue el de la Osicerda citada por Plinio entre las comunidades que disfrutaban del Latium uetus ("antiguo derecho Latino") en el conuentus Caesaraugustanus (Plin. Nat. 3, 3, 24) y heredera, por tanto, de la ibérica usekerte que acuñó moneda como lo hizo luego la propia Osicerda (sobre estas acuñaciones, puede verse el trabajo de GOMIS, M.: "Las acuñaciones de usekerte/Osicerda", Annals de l'Institut d'Estudis Gironins, 36, 1996-1997, pp. 321-333, disponible aquí). La visita debe completarse con la de los materiales que se custodian en el Taller de Prehistoria y Arqueología de Alcañiz, en el centro del casco histórico, a orillas del río Guadalope. Precisamente, el carácter de municipio presuntamente augústeo de Osicerda hace especialmente atractivo el yacimiento de El Palao y no nos resistimos a, en este blog, dejar constancia de los problemas que, a día de hoy, nos parece sigue planteando la reducción Osicerda/El Palao. Como es sabido, hace algunos años, al hilo del descubrimiento de la inscripción HEp7, 967 en La Puebla de Híjar (Teruel) -unos treinta kilómetros al Norte de Alcañiz- F. Beltrán Lloris planteó ubicar el municipium Osicerda en dicha localidad turolense y no en El Palao, cuestión que ha centrado algunos de sus más conocidos trabajos (BELTRÁN LLORIS, F.: "Una liberalidad en La Puebla de Híjar y la localización del municipium Osicerda", Archivo Español de Arqueología, 173-174, 1996, pp. 287-294 y "Sobre la localización de Damania, Leonica, Osicerda y Orosis", Palaeohispanica, 4, 2004, pp. 67-88). Esa reducción plantea el problema de la falta de restos romanos en La Puebla de Híjar sorprendente, al menos, si se trató del municipium Osicerda lo que, unido al carácter "móvil" de las inscripciones podría desaconsejar la reducción Osicerda/La Puebla de Híjar. Ahora bien, si Osicerda es un municipio de derecho latino antiguo debió promocionar a dicho estatuto en época de Augusto y -como sucede en muchos municipia Latina hispanos: "municipios de derecho Latino"- dotarse de aparato monumental justo en ese momento, algo que no parece estar encontrando refrendo en la investigación arqueológica en El Palao, donde la gran reforma monumental se ha atestiguado en torno al 150 a. C., por tanto, en plena época republicana. Además, y como apunta F. Beltrán Lloris, efectivamente, la presencia de las inscripciones tarraconenses RIT, 325 y 341 en las que se alude a la Osicerde(n)sis Porcia Materna que fue sacerdotisa del culto imperial y esposa del notable tarraconense L. Numisius Montanus -cuya carrera política es ya del siglo II d. C.- y al IIuir de Osicerda L. Cornelius Romanus, también de fecha avanzada (sobre las carreras de ambos, pincha aquí) parece no corresponderse con un abandono de la ciudad de El Palao no más allá del 80 d. C. Así pues, a día de hoy, efectivamente, El Palao será el centro urbano íbero-romano más notable de la zona pero no necesariamente deberá ser el municipium Osicerda de Plinio y de las acuñaciones hispano-latinas. Todo ello al margen de lo sugerente que resulte conectar Osicerda con la tribu ibérica de los ositanos citados por las fuentes antiguas (al respecto, véase BURILLO, F.: "Propuesta de una territorialidad étnica para el Bajo Aragón: los ausetanos del Ebro u Ositanos", Kalathos, 20-21, 2001-2002, pp. 159-187: ver resumen aquí y texto completo aquí además de mapa en el singular blog Pax Celtibera).
Descripción: Dado su amplio arco de ocupación histórica -que va casi desde el siglo VI a. C. hasta finales del I d. C. (aunque debió mantener alguna ocupación muy residual hasta la época de la tardoantigüedad a juzgar por el hallazgo, el pasado verano, de un enterramiento de dicho momento al pie de los edificios públicos de la parte alta: ver aquí)- la visita a El Palao es una auténtica lección de Arqueología de campo pues el viajero -auxiliado por un excelente aparato de paneles explicativos instalados por el modélico Consorcio Íberos en Aragón- puede ir contemplando de qué modo una aldea del Ibérico Antiguo pasó a ser una ciudad en el Ibérico Pleno para, después, hacia el 150 a. C. -y ya bajo el control romano- iniciar una profunda reforma urbanística que le dotó de una zona de viviendas y tabernae abiertas a una plaza, de otra área con un probable edificio público sobre una zona supuestamente industrial -tal vez aceitera, una vez que algunos yacimientos turolenses (algunos no muy lejanos como la espectacular Loma de El Regadío, de Urrea de Gaén) están apuntando hacia una intensa producción de aceite en época antigua en la comarca-, un posible templete y, en la parte Oeste del cerro de El Palao una monumental -y muy sugerente- cisterna de abastecimiento de agua que debió funcionar como aljibe hasta bien entrada la época romana (de algunas de esas estructuras se ofrecen fotos en la parte superior de este post). La visita ha de completarse, si es posible, con la de los materiales que se exponen en el Taller de Prehistoria y Arqueología de Alcañiz entre los que, a nuestro juicio, destaca la inscripción funeraria versificada (carmen epigraphicum) de Cornelia Sirasteiun (HEp10, 609), con foto también en la parte superior del presente post y que, aunque no procede de El Palao, es un excepcional complemento a la percepción de la romanidad en la zona.
Bibliografía: La muy reciente edición del volumen de BENAVENTE, J. A., y FATÁS, L.: Iberos en el Bajo Aragón. Guía de la ruta, Zaragoza, 2009 -que alude a El Palao en pp. 164-167 y que incorpora una amplísima bibliografía- cubre una documentación bibliográfica inicial aunque, lógicamente, la larga trayectoria de investigación en el lugar hace inexcusable la consulta de, al menos, los trabajos de BENAVENTE, J. A.: "El poblamiento ibérico en el Valle medio del Regallo (Alcañiz, Teruel)", Kalathos, 3-4, 1984, pp. 155-190 -José Antonio Benavente es hoy Gerente del Consorcio Íberos en el Bajo Aragón y también Director Científico de la investigación en el lugar (desde su sección en dialnet, disponible aquí, puedes acceder a algunas de sus publicaciones sobre las últimas campañas en El Palao, que evitamos citar aquí)- y el de MARCO, F. (coord.): El poblado íbero-romano de El Palao (Alcañiz), Alcañiz, 2003.
Recursos en internet: Pese a la notable trayectoria de investigación que ha llevado este yacimiento, su presencia monográfica en la red es bastante discreta (sí pueden rastrearse muchas noticias de prensa sobre los resultados de las campañas de excavación realizadas cada verano). Además de la ficha que, sobre el yacimiento, ofrece el extraordinario portal Íberos en el Bajo Aragón, existe documentación sobre el mismo en el sensacional buscador de "turismo arqueológico" Arqueotur y, de igual modo que puede resultar útil consultar la voz "Iberos" en la Gran Enciclopedia Aragonesa OnLine que también ofrece una voz específica sobre El Palao que recoge, además, toda la bibliografía básica. Por último, la sección "Huellas Remotas" y "Lugares que Visitar" del apartado de Turismo del Ayuntamiento de Alcañiz ofrece una muy somera descripción del lugar.
Recomendaciones: Al margen de documentarse, primero, sobre el gratamente sorprendente potencial arqueológico de la zona -en el mismo Alcañiz puede visitarse, por ejemplo, el poblado ibérico de El Taratrato- su proximidad a ciudades romanas ya aludidas en este blog bien de forma monográfica -como la colonia Celsa, la propia colonia Caesaraugusta o el municipium augústeo de Lesera, hacia el Valle del Ebro las dos primeras y hacia el Bajo Maestrazgo la tercera- nos exime de realizar aquí nuevas recomendaciones pues en los posts referentes a aquéllas se hicieron muchas sobre los numerosísimos encantos turísticos que ofrece el Bajo Aragón turolense y sus igualmente atractivas comarcas limítrofes.