EL PALAO (Alcañiz)













[Monumental cisterna de almacenamiento de agua; vista de la zona productiva de la parte alta de El Palao; e inscripción funeraria versificada de Cornelia Sirasteiun]

Situación: El poblado íbero-romano de El Palao está ubicado en el término municipal de Alcañiz, a apenas 4 kilómetros del núcleo urbano. Alcañiz es, además, la segunda ciudad de la provincia de Teruel y una de las más hermosas de Aragón. Está perfectamente bien comunicada tanto con el valle del Ebro -a través de Zaragoza- como con la costa -especialmente por Castellón- gracias a la N-232. Sin embargo, no deja de sorprender que la ciudad cuente ya con un espectacular circuito de Fórmula 1 y de Moto GP -MotorLand Aragón- y, sin embargo, siga, desde hace años, esperando una mejora de su conexión viaria con Zaragoza -que, excepto en unos pocos kilómetros, hasta El Burgo de Ebro sigue siendo por carretera general- y todavía no cuente con una variante que evite al viajero tener que cruzar su agitado casco urbano.
Acceso: Para llegar a El Palao, el viajero, saliendo de Alcañiz, ha de tomar dirección Zaragoza y una vez atravesada la gran rotonda que deja a la izquierda el gran establecimiento de una conocida cadena de grandes superficies de alimentación debe continuar hasta la siguiente rotonda y, en ella, girar a la izquierda. Después, continua por una larga recta -a cuyo final ya se divisa el montículo sobre el que se asentó la ciudad romana: nuevamente controlando una amplia y fértil llanura- y, debidamente indicado, debe tomar un desvío nuevamente a la izquierda que le conduce, por una pista, hasta los pies del área arqueológica.
Tipología: Poblado íbero-romano (con perduración que no pasó de la década de los ochenta del siglo I d. C.) y posible municipio de derecho latino antiguo si es que su solar fue el de la Osicerda citada por Plinio entre las comunidades que disfrutaban del Latium uetus ("antiguo derecho Latino") en el conuentus Caesaraugustanus (Plin. Nat. 3, 3, 24) y heredera, por tanto, de la ibérica usekerte que acuñó moneda como lo hizo luego la propia Osicerda (sobre estas acuñaciones, puede verse el trabajo de GOMIS, M.: "Las acuñaciones de usekerte/Osicerda", Annals de l'Institut d'Estudis Gironins, 36, 1996-1997, pp. 321-333, disponible aquí). La visita debe completarse con la de los materiales que se custodian en el Taller de Prehistoria y Arqueología de Alcañiz, en el centro del casco histórico, a orillas del río Guadalope. Precisamente, el carácter de municipio presuntamente augústeo de Osicerda hace especialmente atractivo el yacimiento de El Palao y no nos resistimos a, en este blog, dejar constancia de los problemas que, a día de hoy, nos parece sigue planteando la reducción Osicerda/El Palao. Como es sabido, hace algunos años, al hilo del descubrimiento de la inscripción HEp7, 967 en La Puebla de Híjar (Teruel) -unos treinta kilómetros al Norte de Alcañiz- F. Beltrán Lloris planteó ubicar el municipium Osicerda en dicha localidad turolense y no en El Palao, cuestión que ha centrado algunos de sus más conocidos trabajos (BELTRÁN LLORIS, F.: "Una liberalidad en La Puebla de Híjar y la localización del municipium Osicerda", Archivo Español de Arqueología, 173-174, 1996, pp. 287-294 y "Sobre la localización de Damania, Leonica, Osicerda y Orosis", Palaeohispanica, 4, 2004, pp. 67-88). Esa reducción plantea el problema de la falta de restos romanos en La Puebla de Híjar sorprendente, al menos, si se trató del municipium Osicerda lo que, unido al carácter "móvil" de las inscripciones podría desaconsejar la reducción Osicerda/La Puebla de Híjar. Ahora bien, si Osicerda es un municipio de derecho latino antiguo debió promocionar a dicho estatuto en época de Augusto y -como sucede en muchos municipia Latina hispanos: "municipios de derecho Latino"- dotarse de aparato monumental justo en ese momento, algo que no parece estar encontrando refrendo en la investigación arqueológica en El Palao, donde la gran reforma monumental se ha atestiguado en torno al 150 a. C., por tanto, en plena época republicana. Además, y como apunta F. Beltrán Lloris, efectivamente, la presencia de las inscripciones tarraconenses RIT, 325 y 341 en las que se alude a la Osicerde(n)sis Porcia Materna que fue sacerdotisa del culto imperial y esposa del notable tarraconense L. Numisius Montanus -cuya carrera política es ya del siglo II d. C.- y al IIuir de Osicerda L. Cornelius Romanus, también de fecha avanzada (sobre las carreras de ambos, pincha aquí) parece no corresponderse con un abandono de la ciudad de El Palao no más allá del 80 d. C. Así pues, a día de hoy, efectivamente, El Palao será el centro urbano íbero-romano más notable de la zona pero no necesariamente deberá ser el municipium Osicerda de Plinio y de las acuñaciones hispano-latinas. Todo ello al margen de lo sugerente que resulte conectar Osicerda con la tribu ibérica de los ositanos citados por las fuentes antiguas (al respecto, véase BURILLO, F.: "Propuesta de una territorialidad étnica para el Bajo Aragón: los ausetanos del Ebro u Ositanos", Kalathos, 20-21, 2001-2002, pp. 159-187: ver resumen aquí y texto completo aquí además de mapa en el singular blog Pax Celtibera).
Descripción: Dado su amplio arco de ocupación histórica -que va casi desde el siglo VI a. C. hasta finales del I d. C. (aunque debió mantener alguna ocupación muy residual hasta la época de la tardoantigüedad a juzgar por el hallazgo, el pasado verano, de un enterramiento de dicho momento al pie de los edificios públicos de la parte alta: ver aquí)- la visita a El Palao es una auténtica lección de Arqueología de campo pues el viajero -auxiliado por un excelente aparato de paneles explicativos instalados por el modélico Consorcio Íberos en Aragón- puede ir contemplando de qué modo una aldea del Ibérico Antiguo pasó a ser una ciudad en el Ibérico Pleno para, después, hacia el 150 a. C. -y ya bajo el control romano- iniciar una profunda reforma urbanística que le dotó de una zona de viviendas y tabernae abiertas a una plaza, de otra área con un probable edificio público sobre una zona supuestamente industrial -tal vez aceitera, una vez que algunos yacimientos turolenses (algunos no muy lejanos como la espectacular Loma de El Regadío, de Urrea de Gaén) están apuntando hacia una intensa producción de aceite en época antigua en la comarca-, un posible templete y, en la parte Oeste del cerro de El Palao una monumental -y muy sugerente- cisterna de abastecimiento de agua que debió funcionar como aljibe hasta bien entrada la época romana (de algunas de esas estructuras se ofrecen fotos en la parte superior de este post). La visita ha de completarse, si es posible, con la de los materiales que se exponen en el Taller de Prehistoria y Arqueología de Alcañiz entre los que, a nuestro juicio, destaca la inscripción funeraria versificada (carmen epigraphicum) de Cornelia Sirasteiun (HEp10, 609), con foto también en la parte superior del presente post y que, aunque no procede de El Palao, es un excepcional complemento a la percepción de la romanidad en la zona.
Bibliografía: La muy reciente edición del volumen de BENAVENTE, J. A., y FATÁS, L.: Iberos en el Bajo Aragón. Guía de la ruta, Zaragoza, 2009 -que alude a El Palao en pp. 164-167 y que incorpora una amplísima bibliografía- cubre una documentación bibliográfica inicial aunque, lógicamente, la larga trayectoria de investigación en el lugar hace inexcusable la consulta de, al menos, los trabajos de BENAVENTE, J. A.: "El poblamiento ibérico en el Valle medio del Regallo (Alcañiz, Teruel)", Kalathos, 3-4, 1984, pp. 155-190 -José Antonio Benavente es hoy Gerente del Consorcio Íberos en el Bajo Aragón y también Director Científico de la investigación en el lugar (desde su sección en dialnet, disponible aquí, puedes acceder a algunas de sus publicaciones sobre las últimas campañas en El Palao, que evitamos citar aquí)- y el de MARCO, F. (coord.): El poblado íbero-romano de El Palao (Alcañiz), Alcañiz, 2003.
Recursos en internet: Pese a la notable trayectoria de investigación que ha llevado este yacimiento, su presencia monográfica en la red es bastante discreta (sí pueden rastrearse muchas noticias de prensa sobre los resultados de las campañas de excavación realizadas cada verano). Además de la ficha que, sobre el yacimiento, ofrece el extraordinario portal Íberos en el Bajo Aragón, existe documentación sobre el mismo en el sensacional buscador de "turismo arqueológico" Arqueotur y, de igual modo que puede resultar útil consultar la voz "Iberos" en la Gran Enciclopedia Aragonesa OnLine que también ofrece una voz específica sobre El Palao que recoge, además, toda la bibliografía básica. Por último, la sección "Huellas Remotas" y "Lugares que Visitar" del apartado de Turismo del Ayuntamiento de Alcañiz ofrece una muy somera descripción del lugar.
Recomendaciones: Al margen de documentarse, primero, sobre el gratamente sorprendente potencial arqueológico de la zona -en el mismo Alcañiz puede visitarse, por ejemplo, el poblado ibérico de El Taratrato- su proximidad a ciudades romanas ya aludidas en este blog bien de forma monográfica -como la colonia Celsa, la propia colonia Caesaraugusta o el municipium augústeo de Lesera, hacia el Valle del Ebro las dos primeras y hacia el Bajo Maestrazgo la tercera- nos exime de realizar aquí nuevas recomendaciones pues en los posts referentes a aquéllas se hicieron muchas sobre los numerosísimos encantos turísticos que ofrece el Bajo Aragón turolense y sus igualmente atractivas comarcas limítrofes.

IN CVPA REQVIESCIT



[Monumental cupa de arenisca -CIL, II, 6338aa- en la necrópolis de Los Bañales, sin duda una de las cupae más grandes de Hispania y extraordinario ejemplo del creciente catálogo cincovillés: ver aquí otros casos del territorio de la citada ciudad romana]

Conocida es, para los lectores asiduos de este blog, la muy intensa actividad de Extensión Universitaria -y, en definitiva, de promoción del conocimiento científico y la investigación multidisciplinar- que viene desarrollando en los últimos años la UNED de Tudela. Pues bien, en apenas veinte días, a mediados del próximo mes de Abril, esa labor va a concretarse en un nuevo coloquio que, en este caso, tiene el valor añadido de cumplir un reto especial: el de constituir el I Coloquio de Arqueología e Historia Antigua de Los Bañales, un yacimiento arqueológico romano ubicado en el término municipal de Uncastillo que está siempre -por razones obvias- muy presente en este blog en el que, a menudo, enlazamos a la web oficial del mismo: www.losbanales.es. La razón de la alianza entre la UNED de Tudela y la Fundación Uncastillo es clara: ambas firmaron un convenio de colaboración el pasado año 2009 (ver noticia aquí) y en virtud de él el centro navarro da cobertura académica a la actividad científica exigida por el Plan de Investigación que el Gobierno de Aragón desarrolla en Los Bañales.

Pues bien, para este I Coloquio de Arqueología e Historia Antigua de Los Bañales -que desea ser un foro periódico de discusión (científica y rigurosa pero abierta también al gran público) relacionada con la marcha de la investigación en la ciudad romana de Los Bañales- se ha elegido el tema de las cupae, un singular tipo de sepulcro romano abovedado en forma de medio tónel muy frecuente en Hispania pero también en otras partes del Imperio y para el que el entorno arqueológico de Los Bañales y de las otras ciudades romanas de las Cinco Villas (Cabezo Ladrero de Sofuentes y Campo Real/Fillera de Sos del Rey Católico-Sangüesa, para las cupae de este yacimiento ver aquí) ha aportado ya un total de catorce ejemplares convirtiéndose dicho conjunto en el más relevante del Norte peninsular donde -salvo contados casos en Pallantia o Legio VII Gemina- dicho tipo monumental es poco frecuente.

Así, entre el 16 y el 18 de Abril próximos, la hermosa villa románica de Uncastillo, al Norte de la provincia de Zaragoza, será la capital de la investigación en Epigrafía y Arqueología funeraria romanas. En el coloquio no sólo se presentarán científicamente las cupae del área cincovillesa (objeto, algunas de ellas, de un artículo de quien escribe estas páginas, recientemente publicado en la revista Polis -número 20- y de otro con algunas novedades no hace mucho editado en Aquitania -número 24- con la colaboración de otros investigadores) sino que diversos especialistas estudiarán los soberbios y numerosos conjuntos de Augusta Emerita, Pax Iulia, Myrtilis, Ossonoba u Olisipo en Lusitania, Italica en la Baetica y, sobre todo, Barcino, Tarraco y Complutum en la Citerior (en los enlaces, no en todos los casos la excelente Hispania Epigraphica OnLine ha depurado las cupae entre los epitafios; para todos los casos hispanos que sí tiene inventariados, pincha aquí). Además, el coloquio se cerrará con una mesa redonda en la que se tratará de profundizar en el origen, los patrones de difusión, los usos sociales y la simbología de estas cupae (algunos de los problemas que éstas plantean a los investigadores pueden conocerse a partir de este programa emitido en RNE dentro de la programación de la UNED -pincha aquí- o a través de esta noticia de Aragón TV relativa a la campaña de invierno en Los Bañales -pincha aquí-), sin lugar a dudas uno de los temas aun pendientes de solución -¡cómo tantos otros!- en la investigación.

Si quieres aprender más sobre el apasionante mundo funerario romano y, sobre todo, conocer de cerca -parafraseando a Luciano de Samósata- quommodo historia scribenda sit ("de qué modo debe escribirse -y de hecho se escribe- la Historia") no debes faltar a la cita en Uncastillo (puedes inscribirte aquí, a la vez que consultas el programa del evento) donde, seguro, como reza la inscripción
AE, 1928, 201 de Tarraco en la que nos hemos inspirado para el título de este post: "descansaremos entre cupae". Y, en cualquier caso, como pórtico, una conferencia sobre el tema, abierta, para quien quiera asistir, el día 10 de Abril, en el Salón de Congresos San Miguel, de la Fundación Uncastillo (pincha aquí para ver más datos).

OSCA (Huesca)



















[Pintura de J. A. Merklein con representación de Minerva enseñando los planos de la supuesta Uniuersitas Sertoriana a Sertorio (1768), inscripción CIL, II, 3002 con alusión a dos sacerdotes del culto imperial local, y sillares de las primitivas construcciones monumentales del siglo I a. C., piezas todas expuestas en el Museo Provincial]

Situación
: La apacible ciudad de Huesca, capital de la provincia del mismo nombre y de la Comarca del Alto Aragón, y centro de la conocida Comarca de la Hoya de Huesca, casi participa de las mismas potencialidades estratégicas que su vecina Zaragoza y, por tanto, está muy bien comunicada (ver aquí) con la mayor parte de las grandes ciudades del Nordeste Peninsular pero también con la capital, Madrid. Su situación, a apenas un centenar de kilómetros del valle del Ebro pero a la misma distancia respecto de las estribaciones pirenaicas le ha valido un notable protagonismo histórico que, de hecho, también se dió en la Antigüedad, como más adelante explicaremos.
Acceso: A quien quiera saber cómo llegar a Huesca, le remitimos al muy documentado enlace que, respecto de "Cómo venir a Huesca" ofrece la web oficial de Turismo de la ciudad de Huesca (ver aquí) pues en ella se ofrecen datos de las principales empresas de transporte que acercan a tan sugerente ciudad.
Tipología: Ilergete –según la lista de póleis del alejandrino Ptolomeo (Ptol. Geog. 2, 6, 67)– o Suessetana –según la descripción del conuentus Caesaraugustanus (con mapa aquí) llevada a cabo por Plinio (Nat. 3, 3, 24) lo que, por otra parte, se convierte en pieza clave de la reciente reestructuración del mapa étnico del Norte de Aragón propuesta por BELTRÁN, F.: “Hacia un replanteamiento del mapa cultural y étnico del Norte de Aragón”, en VILLAR, F., y FERNÁNDEZ ÁLVAREZ, Mª P. (eds.): Religión, lengua y culturas prerromanas de Hispania, Salamanca, 2001, pp. 61-82 y de la que, a propósito de los Suessetanos, nos hemos hecho eco recientemente en otro post de este blog (pincha aquí)– la Osca romana –citada en los itinerarios (It. Ant. 391, 5 y 451, 5) y catalogada como municipio de derecho romano por el aludido texto pliniano– es sólo la continuidad de la indígena Bolskan que acuñó monedas de plata y bronce desde el siglo II a. C. (consultar aquí o aquí las series y ver aquí un denario) y que continuó acuñando moneda en época romana con Augusto, Tiberio y Calígula (ver aquí). Su fama en la Antigüedad estuvo notablemente amplificada (pocas ciudades del Ebro Medio están tan citadas en las fuentes antiguas como Bolskan/Osca) por la vinculación de la ciudad al proscrito Q. Sertorio –que, como aun recuerda un cuadro de 1768, del flamenco J. A. Merklein que se expone en el Museo Provincial de Huesca (con foto en la parte superior de este post) la convirtió en los años setenta del siglo I a. C. en centro de sus operaciones de resistencia frente a Pompeyo y en eje de la forja de una notable clientela local (puede verse, al respecto, un interesante y poco conocido artículo de GARCÉS, C.: "Quinto Sertorio, fundador de la Universidad de Huesca: el mito sertoriano oscense", Alazet: Revista de Filología, 14, 2002, pp. 243-256, disponible aquí)– y por su condición de escenario de la guerra civil entre César y Pompeyo en la célebre campaña de Ilerda de la que hablan Varrón (RRust. 1, 57, 2), Estrabón (Strab. 3, 4, 10), o Veleyo Patérculo (Vell. 2, 30, 1). Lo cierto es que, su condición de temprano municipio romano, y su protagonismo histórico le debieron dotar de una red de edificios monumentales (que incluyeron –como ha revelado hace un par de años la Arqueología urbana: ver aquí algunas noticias en los medios al respecto– incluso un teatro) notablemente vistosos ya en época de Augusto de los que, sin embargo, poco puede disfrutar el viajero dada la habitual problemática de la investigación arqueológica sobre cascos urbanos.
Descripción: Los problemas que, habitualmente, plantea la arqueología urbana son los que explican que quien se acerca hoy a la capital del Alto Aragón, Huesca, apenas puedan aprehender parte de su insigne pasado romano observando un mapa del casco histórico en el que se dibuja claramente el primitivo emplazamiento de la ciudad antigua (ver aquí) o a partir de la visita a dos puntos de interés en su casco histórico: la Iglesia del Monasterio de San Pedro el Viejo -que custodia, hoy en proceso de restauración, un hermoso sarcófago romano en mármol con imago clipeata ("retrato en cartela circular", ver foto aquí), fechado en el siglo II d. C. y que fue reutilizado en el siglo XII para conservar los restos del rey Ramiro II de Aragón- y el Museo Arqueológico Provincial. Éste, de hecho, se antoja la plataforma ideal no sólo para conocer algunas de las evidencias mobiliares recuperadas en el casco histórico de la antigua Osca (en el patio se conservan algunos grandes sillares con inscripciones ibéricas procedentes del primer horizonte monumentalizador de la ciudad: ver foto en la parte superior de este post) sino para aproximarse -a través de la cultura material- a algunos de los más destacados yacimientos romanos de la provincia, en especial la ciudad romana de Labitolosa (ya objeto de atención en este post antiguo de nuestro blog, con blog de los estudiantes que en él excavan cada año de la mano del Grupo VRBS de la Universidad de Zaragoza aquí, página con documentación gestionada desde el municipio de La Puebla de Castro, y algunas excelentes reconstrucciones virtuales de sus edificios aquí, a partir del minuto 3.40), la uilla Fortunatus de Fraga (para conocer más pincha aquí o aquí), o la ignota ciudad que ocupó el solar del Monte Cillas en Coscojuela de Fantova (también con más datos en la Gran Enciclopedia Aragonesa OnLine). Respecto de la Osca antigua, al visitante le da la bienvenida al Museo un sensacional pedestal (CIL, II, 3002 ver foto en la parte superior de este post) en el que la Victoria Augusta es homenajeada por los seuiri ("sacerdotes locales del culto imperial", ver aquí explicación en francés sobre dicho sacerdocio) L(ucius) Cornelius Phoebus y L(ucius) Sergius Quintillus, pedestal que, sin duda, es preludio de otras joyas epigráficas conservadas y expuestas en la exposición permanente de dicho Museo: las laudas sepulcrales sobre mosaico AE, 1920, 4; AE , 1977, 472 e HEp13, 356, todas del citado yacimiento de Coscojuela de Fantova, el excelente grafito sobre jarra de engobada recuperado en excavaciones urbanas en Huesca (ver aquí), o la hermosa placa de mármol blanco con inscripción funeraria al niño de ocho años Porcianus (AE, 1981, 558) recuperada en Sabiñánigo. Pedagógicamente, además, se trata de un Museo sobresaliente que permite que el profano capte, en seguida, la esencia de los grandes enclaves vinculados a la antigüedad oscense.
Bibliografía: Todas las fuentes sobre la Osca romana y la Bolskan prerromana ilergete pueden consultarse, una vez más, en ROLDÁN, J. M. (dir.): Diccionario Akal de la Antigüedad Hispana, Madrid, 2006, p. 699 y, con un excelente tratamiento de las dos cecas de acuñación (en pp. 65-69) pero también de la topografía del lugar (pp. 255-257), en ASENSIO, J. Á.: La ciudad en el mundo prerromano en Aragón, Zaragoza, 1995. A partir de ahí, existen algunas publicaciones parciales sobre algunos de los hallazgos que ha ido proporcionando la ciudad en los fascículos de 1986-1987, 1988-1989 y 1990 de la serie Arqueología Aragonesa (en relación a los hallazgos de los años ochenta en la Avda. Martínez de Velasco, C/Costa-Costanilla de Sellán o Plaza de Lizana: correspondientes a grandes muros de edificios indeterminados que certificaban una notable monumentalización del lugar desde el siglo I a. C.) y un válido balance general en JUSTE, N., y PALACÍN, Mª V.: “Arqueología urbana en Hiesca: nuevas aportaciones para el conocimiento de la ciudad romana”, Caesaraugusta, 66-67, 1989-1990, pp. 181-194 o en AGUILERA, I. et alii: El solar de la Diputación Provincial de Huesca. Estudio histórico-arqueológico, Huesca, 1987 así como en el ya desfasado trabajo de DOMÍNGUEZ, A., MAGALLÓN, Mª Á., y CASADO, P.: Carta Arqueológica de España: Huesca, Huesca, 1984. Desde una perspectiva reciente, puede sondearse información y recopilación bibliográfica sobre la Osca romana en el sensacional trabajo de BELTRÁN, F., MARTÍN-BUENO, M., y PINA, F.: Roma en la Cuenca del Ebro. La Romanización en Aragón, Zaragoza, 2001.
Recursos en internet: Además de la entrada dedicada a Osca en la Gran Enciclopedia Aragonesa OnLine, de algunas noticias sobre el tema publicadas en el Blog del Aragón Romano, o de la voluntariosa web Altoaragon.org, puede seguirse una panorámica de las noticias que dan las fuentes antes citadas sobre la Osca romana a través del blog El Oscense (pincha aquí). Por su parte, la recientemente creada Red Digital de Museos de España (CER.Es) ofrece, en la sección dedicada al Museo de Huesca, una sugerente galería de imágenes (ver aquí).
Recomendaciones: Desde luego, el slogan publicitario que alude a la magia de Huesca (pincha aquí) para promocionar la amplísima oferta turística de la provincia -especialmente natural pero también artística y patrimonial-, hace también justicia a Huesca, la capital. Ciudad pequeña pero agradable, limpia y algo enigmática, ofrece al amante de la buena mesa una cita sinpar en la Taberna de Lilas Pastia que -tal vez, junto con el complejo La Venta del Sotón, a las afueras de Huesca, dirección Bolea- se ha convertido en todo un icono de los paladares más exigentes y de los bolsillos más generosos (uno siempre ha apostado por la taberna de Los Argentinos que, desde luego, a otro nivel, nunca ha defraudado). Para dormir, aunque la oferta es amplia, resulta cómodo, con buena relación calidad/precio y excelente trato los Apartamentos del Abadía Las Torres, junto a la estación de autobuses y de ferrocarril.

DOCERE, DELECTARE, MOVERE



[Reportaje de Pyrene sobre Los Bañales, en DVD recientemente editado por parte
del
Gobierno de Aragón][Hazte, desde aquí, seguidor del Canal de Vídeos de Los Bañales en YouTube]

Ya se ha pasado el brevísimo mes de Febrero y, una vez más lo hace para quien escribe este blog, marcado por una intensa actividad en torno al yacimiento de Los Bañales. Los notables resultados de la VI Campaña de Excavaciones Arqueológicas (ver aquí noticia aparecida en El Periódico de Aragón) el respaldo social de los trabajos de investigación en el yacimiento evidenciado en la numerosísima asistencia a la conferencia del pasado 13 de Febrero sobre "La presencia romana en las Cinco Villas" (ver síntesis aquí y noticias en EjeaDigital, Aragón TV y las oficinas de prensa de la UNED de Tudela y de la Fundación Uncastillo), y la apertura del Canal de Vídeos sobre Los Bañales en el inexcusable YouTube (pincha aquí para acceder) han marcado, sin duda, este mes. Precisamente por eso, queremos abrir este post con un vídeo procedente del DVD recientemente editado por el Gobierno de Aragón con información de todos los yacimientos que son objeto de un Plan General de Investigación. Por eso, y porque los próximos meses -seguro que no en este blog, que pronto, lo prometemos, recuperará su temática habitual y su repaso a los Oppida Imperii Romani que es, en definitiva, la vocación con que nació- van a estar también -y de nuevo- marcados por Los Bañales. Una nueva conferencia, programada para el día 10 de Abril -sobre "Las cupae funerarias de las Cinco Villas: aproximación al paisaje funerario de las ciudades romanas cincovillesas"- y complementada, además, para quien lo desee, con una visita guiada al yacimiento romano (inscríbete aquí) harán de pórtico de una nueva cita académica promovida por la UNED de Tudela, esta vez de la mano de la Fundación Uncastillo: el I Coloquio de Arqueología e Historia Antigua de Los Bañales, un proyecto con vocación de continuidad y que en su primera edición se consagará al estudio, precisamente, de las cupae hispanas, un tipo singular de sepulcro romano extraordinariamente bien documentado en las Cinco Villas de Aragón (inscríbete aquí). La organización, además, ha hecho un gran esfuerzo para que el precio de inscripción esté muy ajustado y nadie pueda quedarse sin asistir por cuestiones de presupuesto. Allí, pues, podremos vernos.

Ojalá que este tipo de eventos y el modo cómo quienes hacemos posible el día a día de la investigación en Los Bañales estén sirviendo para "enseñar, agradar y animar", la trilogía que -bajo el lema docere, delectare et mouere- tanto reivindicó la retórica clásica casi desde el calagurritano Quintiliano (Quint. Inst. Or. 2, 11) y que, desde luego, "popularizó" el Siglo de Oro español. Lo explicaremos: enseñar a quienes tienen la vocación siempre loable de aprender, agradar a quienes aman la Antigüedad Clásica y animar a aquéllos que, por recelos absurdos o por celos insondables, no creen aun en el futuro de un proyecto como el de Los Bañales.